Capítulo 107.

Sin decir palabra, Zayn la llevó hacia la casa con el brazo alrededor de su espalda.
Se sentaron en el sofá, y se voltearon para poder mirarse fijamente lo mejor posible.
-No te entiendo. No entiendo nada. Habló ella dando pequeñas cabezadas de negación.
-Te lo voy a explicar, tranquila. -Contestó poniendo sus manos encima de las de Catherine, que estaban cruzadas sobre sus propias rodillas.
La chica miró cómo él se movía hasta apoyar sus manos en las de ella, y dejó la mirada clavada en los finos dedos rozando los suyos.
-No se lo que quieres... No se a quién quieres -Dijo Cat rompiendo un largo e incómodo silencio.
-A ti, te quiero a ti, y estar contigo todo el tiempo que pueda.
-No me mientras más. -Respondió apartando las manos de Zayn bruscamente. -Estoy harta de tus mentiras. Que si te quiero mucho, que si eres todo para mi. -Dijo imitando sus gestos- Pero después ni una llamada. NI UNA!
-Qué?!
-Si tanto me quieres, por qué no me llamaste para preguntarme cómo estaba? Para decirme que me echabas de menos? Por qué no me mandaste un mensaje? Por qué no me mencionaste ni en un tweet? Por qué ni siquiera me hablaste por WhatssApp? Ya veo cuaaaaaanto me quieres. -Ya estaba de pie cuando acabó de decir esto último, lo más sarcásticamente posible.
-No es así Catherine, por favor, escúchame -Le habló parándose a su lado.
-No. Sabes qué? Cuando yo quería escuchar tu voz, tú no estabas para mi, así que ahora me quieres hablar, yo no estaré para ti.
Tras esto salió con paso firme al jardín.
No sabía cuanto había durado aquella conversación, pero parecía que en menos de dos minutos, ya había oscurecido.
Se sacó los zapatos y caminó por el húmedo césped, hasta llegar al borde de la piscina, donde se sentó, y con los pantalones arremangados, se mojó los pies. Jugueteó con ellos debajo del agua, creando unas pequeñas ondas alrededor de éstos.
Estuvo allí sentada un largo rato, absorta en sus pensamientos. "Soy una terca" y "Siempre me pasa igual" eran los dos más presentes en ese momento.
-Crees que si no te quisiera, hubiera preparado toda esta sorpresa? Crees que hubiera mandado recrear un lugar tan parecido a aquel en Nottingham? Crees que si no te quisiera haría esto...=
La frase de Zayn quedó en el aire, ahogada por el ruido de algo caer en el agua, mojando a Catherine casi al completo.
-Me acabas de empapar! -Se quejó a gritos.
Él no respondía y empezó a entender la situación...
Zayn había estado hablando cerca suya, luego algo cayó al agua y él ya no estaba a su lado... No tenía dudas, de que por segunda vez, había superado un miedo por amor.
-Está bien, te perdono, sal ya.
Seguía sin haber respuesta.
-Zayn sal del agua, deja de hacer el imbécil.
El corazón de Catherine se aceleraba con cada palabra, notaba como si fuera a salirse del pecho, que parecía comprimirse.
No podía ver la piscina completamente, a causa de la oscuridad, y no sabía si Zayn había resbalado hasta caer, si se había tirado... pero él estaba ahí metido, y no quería, o no podía contestar. Y ésta segunda posibilidad la preocupó de tal manera, que sin pensárselo dos veces, se tiró al agua tal y como estaba.
Si el amor de su vida estaba ahí dentro y corría peligro, la culpa sería suya, y totalmente suya, y eso no se lo perdonaría jamás.

Capítulo 106.

[Buenas! Repito en esta entrada, quién quiera que lea su novela, o el blog, que me lo ponga en un comentario abajo. Ya sigo a un par de ellos que me gustaron mucho ;)
Si alguien quiere que le pase esta historia por twitter, que me lo deje en un coment, o en mi twitter: @ZaynsWishes. Gracias por leer preciosos y preciosas ♥ ]


El conductor no tardó mucho en desistir ante sus gritos, y paró delante de una gran casa blanca, conducida por un precioso camino de piedra.
-Baja. -Le espetó el chófer.
-Qué?!
Catherine miró a su alrededor y compobó que no había nada más que aquella casa. Ni gente, ni árboles... nada. Aquello le produjo una extraña sensación de desasosiego.
-Que bajes. -Le ordenó- por favor.- Éstas dos últimas palabras las dijo, esperando que tras pronunciarlas, ella obedeciera.
Así fue, Cat bajó del taxi lentamente y cuando estuvo completamente fuera, oyó cómo el auto volvía a arrancar y se iba con sus pertenencias dentro.
Se quedó plantada en medio de la calle, sin saber qué hacer. Pensó en cuánto tiempo tardaría en encontrar a alguien cerca... Un pensamiento que se disipó mucho antes de lo esperado.
-Puedo ayudarte? -Le preguntó una mujer de pelo negro, y de gran belleza, para tratarse de alguien adulto.
-Ah si, por favor -Contestó con una tímida sonrisa.
Aquel pelo, aquel rostro... Le sonaba de algo... Le resultaba vagamente familiar.
-Qué ocurre? -Preguntó la mujer ante su expresión de extrañeza.
-Nada... es que, su cara, me suena... pero es imposible.
-Si. Completamente. Veo que no eres de aquí -Respondió cambiando de tema.
-No, no lo soy. Vivo en Nottingham, bueno, a veces en Londres, -Mientras contaba esto, se puso colorada - vine a visitar a unos amigos, pero el taxista me la jugó mal y me dejó aquí. Se llevó mis cosas y no puedo avisar a nadie.
-No hay problema, pasa y llamas desde mi casa -Se ofreció amablemente.
-Me dejaría? Muchas gracias, de verdad, acaba de salvarme, enserio.
-No es nada -Sonrió- si necesitas algo de comer, o beber o algo, avísame.
-Es suficiente, no quiero molestarla.
Entraron por el camino de piedra, pero no siguieron hacia la casa, si no que la rodearon.
-Entraremos por el patio, dejé la puerta de atrás abierta. -Sonrió.
Catherine la siguió y se sorprendió mucho al ver lo que tenía ddelante; Una piscina de suelo rectangular, un bonito y cuidado césped, decorado con antorchas y una cama blanca con dosel al fondo.
Se le hizo un nudo en la garganta al ver aquello. Había estado en un sitio así, muchos meses antes, junto a Zayn.
-Te gusta? -Le preguntó la mujer ante su  perplejidad.
-Mucho... -Contestó con un tono casi inaudible.
-Voy a buscar el teléfono, espera un momento. -Habló poniéndole la mano en la espalda.Catherine recorrió con la mirada aquel paisaje. Cerró los ojos y recordó aquellos momentos... Zayn corriendo detrás de ella hasta caer en la piscina. El detalle de que él se metiera al agua sólo por amor... Sus besos mientras la tumbaba en la cama, despertar y salir enrollados con las sábanas, sus miradas mientras hacía el desayuno, las sonrisas que ponía después de cada beso...
-El teléfono. -Oyó enfrente ssuya.
Abrió despacio los ojos, no quería salir de esos pensamientos, estaba bien perdiéndose en ellos. Vio una mano tendida sosteniendo un móvil.
Miró cada centímetro de ésta... del brazo... sabiendo ya a quién pertenecía, y siguió ascenciendo, hasta sus ojos.
-No vas a llamar? -Le preguntó.
A la chica se le lllenaron los ojjos de lágrimas. Él soltó el teléfono en el césped y extendió los brazos para recibirla con un más que cálido abrazo.
Ella, entre aquela sorpresa, y la rabia que sentía porque no la había llamado en todo ese tiempo, se descargó hasta que se quedara sin aire, y sollozar llegara a dolerle.
Se accercó despacito para rodearla y acariciarle su larga melena. Catherine agaraba con fuerza la camiseta del chico por la espalda, y le apretaba hacia su pecho.
Estuvierno casi 15 minutos así, buscando el momento más indicado para hablar.